EL DUELO ES UNA MONTAÑA RUSA DE EMOCIONES
El duelo es una montaña rusa de emociones.
Un día se avanza dos pasos y al siguiente se retrocede cinco.
Pero a lo largo de los años, he comprendido, que en la vida, siempre podemos elegir.
La vida no es un camino de rosas. A lo largo de nuestra vida atravesaremos acontecimientos felices y también dolorosos y aprendí que cuando algo que sucede nos duele, si nos aferramos a la resistencia, al enojo, a la no aceptación de lo ocurrido, el dolor se intensifica llevándonos al sufrimiento.
Es ahí donde podemos elegir.
Elegir seguir aferrados, luchando contra algo que ya no podremos cambiar, torturándonos y sometiéndonos al sufrimiento, o elegir soltar la resistencia y liberarnos del sufrimiento.
Pero toda elección es personal. Nadie puede elegir por nosotros ni obligarnos a hacer nada que no queramos.
Si echas la vista atrás en tu historia de vida, aceptarás que desde que naciste has ido avanzando y evolucionando, y ahora… que tu ser querido no está, tienes que decidir si quieres avanzar, pararte o quedarte en el pasado.
Si decides avanzar, súbete al vagón de tren de la vida y VIVE. Deja que el tiempo fluya, cuida tus pensamientos, déjate llevar por los acontecimientos, piensa en lo bueno que has podido vivir cuando tú ser querido estaba a tu lado.
Se trata de aceptar, de tomar conciencia de que la muerte es una realidad que antes o después le llega a todo el mundo y que llegue cuando llegue, siempre es la peor experiencia de nuestra historia.
Siempre os digo esto: tú naciste un día y te irás cuando menos lo esperes. Tienes la responsabilidad de aprovechar el tiempo que te toque vivir para aprender, dar, construir, aportar, ser feliz, crecer….
Limpia y lava tus lágrimas y continúa tu camino, con el bello recuerdo del amor que tu ser querido te dejo.